No tenemos el mismo PIB,
No somos potencia ni lo seremos en mucho tiempo,
No tenemos los mismos problemas de Suiza o Suecia,
No somos la misma cantidad de individuos y
No tenemos en promedio el mismo nivel socio-cultural,
Es un mal de nuestros y de los tiempos pasados,
Aquí no nació Marx, ni Engels, no aquí nació Lutero.
Volteamos a todos lados buscando reflejarnos,
Reflejos que llegaron con los españoles y no se han querido ir.
Hemos regalado miles de autos lujosos,
Centenares de cuentas multimillonarias,
Casas y casinos, no sin enojo pero si con apatía.
No vivimos en Bruselas,
Pero tenemos Comitán.
No seremos alemanes,
Pero buscamos libertad…
Ni Tlaxcala es Tokio, ni nosotros somos aztecas, o romanos.
Crónicas incompletas de una vida sin vivir.